INTRODUCCIÓN AL FUNAMBULISMO 2 – Consejos y ejercicios básicos para empezar

INTRODUCCIÓN.

Espero aportar mi granito de arena con los vídeos y demás información que dejo, que os ayude y saquéis lo que os pueda valer; aunque me gustaría que también hagáis vuestras críticas y agradecería aquellos consejos que se os puedan ocurrir.

Intentaré sintetizar al máximo las ideas que creo conviene saber durante la práctica de esta disciplina, y que ayudarán a evitar posibles lesiones y a controlar la cuerda/cinta en el menor tiempo posible.

Tengo que decir que hasta ahora no me ha enseñado nadie, con todo lo bueno y malo que ello implica. La verdad, habría preferido que alguien me mostrara algunas nociones, al menos al principio, porque así no habría tenido que descubrir que es lo no se debe hacer cometiendo mis propios errores, y cuando caminas por la cuerda, muchas veces un error es sinónimo de dolor.

Por otro lado, el hecho de aprender sólo, hace que analices y te pares en detalles que de otro modo no te pararías, y no se obvian ciertas cuestiones, ni se tienen ciertas barreras que a veces no es del todo bueno tener…pero disculpadme, esta es solo mi opinión.

Considero que ha sido una suerte conocer a algunas personas, amigos a los que les ha interesado el tema y han compartido, y comparten aún buenos momentos conmigo practicando, aunque el trabajo duro lo hagan por su cuenta. Ellos, casi sin darnos cuenta, me han ayudado a analizar y a asentar más las ideas que tuve que ir descubriendo de forma autodidáctica cuando empecé.

Por ellos y por todo áquel que tenga la inquietud de probar esta actividad, siento la responsabilidad de aconsejar lo mejor que sepa y pueda para que no se cometan los mismos errores que yo he ido teniendo.

CONSEJOS BÁSICOS.

1) La actitud.

No quiero entrar mucho en filosofías ni demás, pues pretendo que este texto, por encima de todo, sea práctico; lo que pasa es que en este caso, y solo en este punto en el que hablamos de la actitud, que es algo más mental que físico, lo creo necesario.

Para mí; cuando estás sobre la cuerda no es bueno tener miedo, estar nervioso ni tenso, y tampoco muy relajado; hay que estar tranquilo, con la cabeza centrada en lo que estás haciendo; es un estado en el que estás listo para reaccionar en la medida justa ante cualquier desequilibrio.

Algo parecido ocurre en la práctica de la escalada y otros deportes y actividades «de riesgo», aunque con otros ingredientes. De todas formas, esto es fácil decirlo e incluso comprenderlo, pero llevarlo a la práctica he interiorizarlo no siempre es fácil.

Si un día en el que estás practicando o quieres practicar no consigues esto, es mejor bajarse y dejarlo para otro momento.

Muchos grandes filósofos, deportistas, etc…, han descrito este estado mental; a mí me gusta la similitud que Bruce Lee hizo con el agua, aunque creo que el la cogió de otros sabios orientales; es decir, el agua se adapta al recipiente que la contiene y fluye por un río adaptándose al curso que este sigue, no tiene que pensarlo, actúa fruto de la improvisación siguiendo la pendiente del terreno y esquivando espontáneamente los obstáculos que hay en su camino. El agua no lucha, pero sin apartarse de su objetivo, se adapta y consigue llegar al punto donde encuentra la calma.

2) Exigencias físicas.

No creo que me equivoque si digo que cualquier persona capaz de andar en suelo firme de forma autónoma, será capaz de caminar sobre una cuerda con un entrenamiento adecuado.

Esta afirmación tiene algunas implicaciones:

• aunque si que es una ventaja, para empezar no es necesario tener una forma física especialmente buena, eso sí, a medida que vayamos progresando conseguiremos mejorarla.
• me atrevería a decir que el hecho de caminar por la cuerda es menos lesivo que caminar en suelo firme, por el empacto de la pisada, que en la cuerda es amortiguado, cosa que no ocurre en el segundo caso.
• el mayor riesgo está en la caída, que no debe ser una «caída», sino una «bajada» voluntaria en el momento que comprendemos que no vamos a controlar el desequilibrio.

Para cumplir este último punto, cualquier estrategia que se os ocurra puede ser buena; de entrada, sugiero que la altura a la que pongáis la cuerda sea mínima, la tensión máxima y la existencia de un apoyo, al menos en uno de los extremos (a ser posible el extremo que este libre, o sea, opuesto al polipasto, «carraca» u otro sistema de tensado que hayamos empleado); un árbol o columna sería perfecto.

Estas tres estrategias serán más prescindibles cuanto más nivel vayamos adquiriendo, aunque para empezar las considero muy aconsejables.

EMPEZAR

Calentar bien, sobre todo caderas, rodillas y tobillos.

Al principio, cuando subimos por primera vez es muy normal que nos tiemblen las piernas de forma un poco/bastante descontrolada. Pienso que se debe a que intervienen músculos de las piernas que están un poco «dormidos», que no usamos con esa intensidad en nuestra vida cotidiana. Esto desaparece en 5-10 minutos como mucho, aunque dependerá de cada uno y de lo persistentes que seáis.

Describiré algunos detalles importantes referentes a la técnica postural que hay que cuidar, al menos al principio.

TÉCNICA CORPORAL

1. Una de las características de andar sobre una cuerda tensa es que si vamos descalzos duele bastante, por tanto, recomiendo usar alguna zapatilla con suela fina y que se ajuste bien al pie.

2. También, por ser la cuerda de sección circular, es muy fácil que gire sobre sí misma cuando estamos sobre ella, por lo que es fundamental que pisemos en diagonal para que se apoye en la concavidad del puente del pie.

3. Si caminamos por una cinta plana ninguna de las 2 condiciones anteriores será indispensable

4. Cuanto más bajamos nuestro centro de gravedad, más fácil resulta mantener el equilibrio. Lo haremos flexionando las piernas.

5. De cintura para arriba debemos mantener una posición erguida, para lo que es bueno llevar cierta retroversión en la cadera.

6. Tenemos que intentar que las oscilaciones de la cuerda sean corregidas y/o amortiguadas por nuestras piernas, que actuarán como muelles que podemos controlar. Así mantendremos lo más estable posible el resto del cuerpo (cabeza y tronco).

7. Debemos intentar mantener los brazos estirados, formando una línea perpendicular con la dirección de la cuerda; separados del cuerpo 90º(en principio), los brazos actúan de contrapeso, y cambiando este ángulo contrarrestan el desequilibrio.

TEORÍA LLEVADA A LA PRÁCTICA.

1º GUARDAR EL EQUILIBRIO EN ESTÁTICO CON UN APOYO.

Creo que la toma de contacto podría ser algo como lo que se ve en este primer vídeo. Ya he hablado antes de la conveniencia de tener cerca un apoyo, para de esta manera evitar bajar/caer y subir constantemente de la cuerda, ahorrando energía para destinarla solo a mantener el equilibrio. Recomiendo que no intenteis caminar desde el principio, no al menos hasta que mantengáis el equilibrio en estático a una pierna y con las dos durante uno o dos minutos mínimo.

2º PRIMEROS PASOS.

Repasar bien el apartado «TÉCNICA CORPORAL», Y LUEGO…

Levantar el pie que queremos adelantar despacio y gradualmente; conviene mantener todo el peso del cuerpo apoyado en el pie que queda atrás, hasta que el que adelantamos esté tocando la cinta bien colocado; solo en este momento y de forma gradual, evitando toda brusquedad desplazamos el peso hasta éste, liberando así al pie atrasado y dejándolo listo para repetir el proceso.Para mí, esta fue la parte más complicada, pues implica caer/bajar y subir muchas veces, con el desgaste que esto supone a nivel psicológico y físico.
Hacer todo el recorrido de la cuerda/cinta sin caer y de forma controlada supone también el avance más importante, pues después de eso todo lo que viene después es perfeccionar la técnica pero sin la pérdida de energía que supone caer y tener que subir continuamente.

3º GIROS.

Con ambos pies atravesados y las punteras hacia el mismo lado de la cuerda, pero manteniendo la posición de los hombros formando una perpendicular a la cuerda; con la mayor suavidad posible, giramos la cadera bajando un poco los brazos para evitar generar lo que en física creo se llama momento de inercia; no sé si es esto o la fuerza centrífuga que provocamos, pero lo que si es seguro es que al girar lo notaréis y comprobaréis que puede desequilibrarnos y hacernos caer; giramos la cadera lo necesario para que nos permita virar 180º la línea de nuestros hombros de forma que nos damos la vuelta. A mí me parece uno de los movimientos básicos más difíciles de hacer con elegancia, pues requiere que el cuerpo esté perfectamente alineado, desde la cadera al punto más alto de nuestra cabeza tienen que estar en la misma vertical.

Espero que con el vídeo estendáis mejor el concepto.

4º SUBIR SIN APOYO

Tenemos que apoyar un pie en la cuerda y el otro acercarlo en el suelo hasta que queda lo más cerca a la vertical del primero.

Luego vamos apoyando gradualmente más peso en el pie que tenemos en la cuerda; éste irá bajando a medida que nos apoyamos en él. De esta forma llegará un punto en que podemos despegar primero el talón y luego la punta del pie que tenemos en el suelo.

Así no provocamos ninguna tensión extra en la cuerda que por rebote nos pueda desequilibrar.

ENTRENAMIENTO BÁSICO:

EJERCICIOS NIVEL MEDIO:

Aquí muestro algunos de los movimientos que intento perfeccionar:

(podéis ver los vídeos en http://vimeo.com/user15808670)